Seguidores

lunes, 19 de noviembre de 2012

CAPITULO 5


- NARRA HAYLEEN –

- ¿Tan rápido ha oscurecido? - Dijo Andy al mirar la ventana.
- ¿ya es tarde no lo crees?. -
- Mirándote tocar el violín de verdad que el tiempo ni siquiera lo sentí. – Escucharlo decir eso realmente me hizo sentir apenada pero en parte me alago.
- Solo trataba de pensar en algo mientras Luu vuelve – Sonreí.
- No te preocupes esta con Bill.  – Su expresión era segura y despreocupada mientras que la mía se lleno de inquietud
- ¿Como que esta con Bill? Como lo sabes. –
- Bueno… debe estarlo es decir… no creo que no la haya encontrado aun. -  Lo mire extrañada pero el no dejaba de sonreírme.
- Claro. – Agache la mirada.
- Hayleen hay una canción que me gusta mucho… humm no recuerdo el nombre pero la tocaba un hombre ¿“Kogan”?…
-  ¿Leonid Borisovich Kogan?. Me miro con sorpresa.
- ¡wow! Su nombre es todo un trabalenguas ¿como es que lo sabes? -
- Me encanta el violín… y el fue un gran violinista,  por supuesto que se su nombre. – Sonreía encantada mirando mi violín.
- Claro es de esperarse… -
- Si quieres… investigas el nombre de la melodía y me dices. Yo con gusto la tocare para ti – Me levante del asiento en el que me encontraba para dejar mi violín descansar.
- Seria un honor escucharte. –  Se acerco a mí y acaricio mi cabello.

- NARRA LUU -

- ¡Oye! – Toque bruscamente el brazo de Bill y esté se detuvo. – No recuerdo que me haya tomado tanto tiempo llegar hasta aquí. –
- Ya casi llegamos. –
- ¡Dijiste eso hace 2 horas!. –
- Bueno, ya falta menos que antes. – Sonrió burlonamente.
- ¡Basta!. –
- Si quieres puedo dejarte aquí…- Miro como quien se siente observado y luego me susurro.  - En la obscuridad. –  Un escalofrió recorrió todo mi cuerpo.
- ¡No te atrevas! Si me ibas a dejar abandonada al menos debiste dejarme cuando aun el sol iluminaba el cielo –  Le reproche.
- Así que… ¿si le tienes miedo a la obscuridad? –
- Por supuesto que no… es solo que… -
- ¿Que? – Se acerco a mi interesado.
- ¡Nada!  - No le diré que estaba asustada por lo que vi, de seguro se reiría de mi.

Lo mire con enojo y continúe caminando a la par suya, mis piernas me estaban matando, me dolían horriblemente  y él… él parecía no afectarle caminada como si nada, yo estaba muy cansada y de pronto la bolsa que sostenía pareció volverse mas pesada; ¡quería arrojarla! Dejarla ahí tirada, ya compraría otro abrigo después pero ¿que le pasa a el? Como es que deja que una señorita cargue una bolsa pesada y la hace caminar tanto ¿Qué clase de caballero es ese?

- Estas muy callada ¿te pasa algo? – De pronto rompió el hielo.
- Nada, es solo que… - Eso es, ahora que suena amable es mi oportunidad de hacer que cargue mi bolsa. – Bueno… hemos caminado por mucho tiempo y estoy cansada. –
- Sabes… yo también me siento algo cansado… es una pena que tengas que aguantar esa bolsa hasta que lleguemos, y caminar con esos zapatos también debe ser cansado.-
- Lo es. – Le dije. Me sonrió y continúo caminando. - ¿No vas a ayudarme? –
- ¿Quién yo? – Se hacia el tonto.
- Ni modos que quien – Lo fulmine con la mirada.
- Para nada…  cárgala tú – hizo un gesto como que diciendo “por tonta” lo cual me estreso.
- ¡Eres un patán! –
- ¡y tu eres una chiquilla! –
- ¡no eres nada caballeroso! –
- ¡Te ofrecí cargar la bolsa antes y no quisiste! – 
- ¡Pero…! ¡Jush! – No sabia que decir… ¡el realmente me enfada!
- Mejor apurarnos a llegar. – Comenzó a caminar más rápido con gesto de disgusto.
- ¡Oye esperame! – Eche a correr de tras de el.

- NARRA ANDY - 

Escuchar el violín ha sido realmente hermoso y relajante pero al parecer una llamada de la madre de Luu fue la que interrumpió ya ha pasado una hora desde que nos habíamos sentado a tomar una tasa de té… Hayleen entro a su habitación para continuar con la llamada  y luego… el sonido de la puerta.

- ¡No puedo creer que seas tan grosero! –
- ¡y tu una ingrata! –
- ¡ya vete! – Le grito Luu a Bill mientras dejaba caer su bolsa en el suelo.
- ¡Mal agradecida! –
- ¡Patán! –
- ¡Chiquilla! –
- Y… ¿están peleando otra vez? – Me atreví a hablar. Amos voltearon a verme…  Luu tenía cara de sorpresa y Bill… bueno, él ya sabia que yo estaba aquí.
- ¿Andy…? ¿Donde esta Hayleen? – Bill entro y cerró la puerta.
- En su habitación -  Respondí su pregunta.  Me acerque hacia ella ignorando a Bill por completo, extendí mi mano y acaricie su mejilla; se sonrojo de inmediato y aunque no me decía nada sabia que la hacia sentir mejor.
- ¿Pero… que esta haciendo en la habitación si tu estas aquí? – Baje mi mano y suspire.
- Parece que la llamo alguien… - Sin mirarme se dirigió hacia la puerta cerrada, la abrió apunto de  chocar con Hayleen quien ya venia hacia afuera.
- ¡oh! Luu… ya llegaste – Bill y yo observamos en silencio como Hayleen abrazaba a Luu aliviada.
- ¿Quien llamo? –
- No era nadie Luu. –
- ¿Me prestas tu teléfono? – Hayleen se lo extendió obediente, el tono de voz de las últimas palabras de Luu era vacío. Miro la pantalla del celular, se lo extendió de regreso a Hayleen y luego se dirigió al cuarto en donde yacía ese hermoso piano.
- Luu espera… - Entro y cerró la puerta.
- ¿Era alguno de sus padres? – Pregunto Bill quien había estado callado observando.
- Amm… - Por la expresión de Hayleen Bill acertó pero ¿como lo supo él? Voltee a mirarlo con dudas revoloteando por toda mi cabeza.
- Creo que es así. – Decidido… Bill camino hacia donde Luu había entrado.
- No la molestes… no se llevan bien y tu presencia podría incomodarle… – Respondió rápidamente Hayleen  y Bill se detuvo pero no precisamente por lo que Hayleen dijo…



- Otra vez esa canción… - Dijo Hayleen llevando las manos a sus ojos y de pronto esas notas parecían transmitir tanta tristeza que incluso sentí como un frio recorría mi espalda mientras Bill yacía inerte a poco espacio de la puerta
- ¿Hayleen? – La llame.
- Creo que es mejor que se vayan – levanto la mirada con los ojos cristalizados.
- Si, eso haremos… vámonos Bill.- Me despedí de ella con un beso en la mejilla y Bill igualmente, ambos salimos en silencio. Caminamos unos cuantos pasos y nos detuvimos, esa melodía triste aun podíamos escucharla.
- ¿Por qué te detienes? –
- Nos vamos a quedar… Algo anda rondando a Hayleen – Le dije seriamente.
- No solo a Hayleen una de esas asquerosas criaturas estaba cerca de Luu hoy –
- Un… -
- Si esas porquerías… - Dijo con desprecio. Hace algunos años Bill tuvo un altercado con los nomos y desde entonces les tiene cierto odio. 
- Pero ellos no le harán daño –
- ¡Pero no están siendo cuidadosos! Luu lo vio y se asusto –
- como que… ¿lo vio? –
- Bueno no directamente, solo su sombra –
- Puede pensar que lo imagino –
- Eso si – Nos quedamos en silencio aun escuchando la melodía que Luu no dejaba de tocar, nuestros agudos oídos nos permitían escuchar con la mayor claridad.
- Bill… ¿como supiste que era alguno de sus padres? –
- No lo se… solo lo intuí porque antes de que la encontrara hablaba por teléfono con ellos… su relación no parece buena ya que al terminar comenzó a llorar –
- Parece afectarle mucho – Dije con tristeza.
- Y… ¿que esta rondando ahí dentro? –
- No lo se… por eso vamos a quedarnos… -
- ¿Qué es lo que te preocupa? –
- Que sea grande… -

- NARRA HAYLEEN -

- Luu… ¿puedo pasar? –

Me sentía muy triste pero… no se me ocurrió una excusa mejor, no debí darle el teléfono… cualquier mentira es mejor a verla así, no me gusta esa canción; trasmite toda la tristeza que siente, expresa su dolor y lo lamentable que es no poder hacer nada para cambiar las cosas. Cualquier canción es mejor a esa. A veces me pregunto; ¿que seria de Luu si yo no hubiera llegado a su vida?, estaría tan sola y con los padres que tiene. “Pídele que no llame mas a ti te hará caso” por mas que trate de convencerla su mama no quiso hablar con ella y por muy ocupados que estén creo que al menos deberían ser considerados en como se siente Luu yo puedo aguantarlo porque al fin y al cabo no son mis padres pero Luu los ama y yo la amo a ella por esto me duele verla tan triste.

- Luu… ¿puedo pasar? – Es la segunda vez que pregunto y no me contesta… quizás el ruido del piano… - ¡oh!- se detuvo.  – ¿Luu? – Un sonido y luego la puerta se abrió.
- Hayleen… - Sus ojos estaban todos rojos por las lagrimas me abrazo y yo le abrace.
- Luu si quieres llorar e incluso gritar… hazlo –
- ¿Por qué no me quieren Hayleen? –
- Si te quieren es solo que están muy ocupados –
- ¿que te dijo madre? –
- Amm… pues eso… que la disculparas pero estaban ocupados –
- ¿porque no me lo dijo a mi? Al menos para escucharla – Su voz disminuía con cada palabra y así mismo sentía como mi hombro se mojaba poco a poco.
- Yo estoy contigo… -

Lloro por un momento mas y luego me pidió tocáramos juntas una melodía


Igualmente la manera en como tocaba el piano me parecía triste… pero esta vez al menos yo la acompañaba, no estaba sola y eso quería, quería hacerle saber que estoy con ella y no es su culpa la falta de atención de sus padres.
Al terminar estábamos en su habitación… veíamos la tele mientras se quedaba dormida…

- Hayleen…  ¿me haces piojito? –
- jaja claro – Una ocasión cuando nuestros  “padres” organizaron una fiesta para presentar a su hija ante la sociedad de ricos como una adulta. Al volver  madre nos llevo a casa y en la limosina  durante  trayecto Luu se recostó en madre y ella comenzó a rascar su cabeza hasta que se quedo dormida. Desde entonces cuando esta triste le gusta que haga lo mismo hasta que duerme… quizás recuerda esa ocasión y por ello se tranquiliza.  

- NARRA LUU –

Ya había amanecido, comencé a abrir mis ojos lentamente… me dolían debido a la luz que entraba por la ventana, cuando mi vista se aclaro vi a Hayleen dormida justo a mi lado… debe ser difícil para ella aguantarme pero no pude evitar derrumbarme ayer… iba a enderezarme cuando note que nuestras manos se hallaban entrelazadas. Que ironía, prometí cuidarla desde el incidente y resulta que ella me cuida a mi, soy una mala hermana. Lo menos que puedo hacer es no despertarla, esperare un poco más antes de levantarme.

- NARRA ANDY –

Estábamos sentados observando el departamento a unos cuantos metros de distancia, la chicas que pasaban nos sonreían y podía notar como Bill les  guiñaba el ojo; seguro esta hambriento… y no lo culpo no hemos comido  en días y la desabrida comida humana simplemente no se compara. De pronto se levanto del lugar donde nos hallábamos y comenzó a caminar.

- Bill… ¿A dónde vas? –
- Estoy aburrido… en toda la noche no vi nada extraño así que iré a tocar… -
- ¿Vas a ir a molestar tan rápido?  - 
- Tu puedes seguirle acariciando la mejilla yo voy a platicar con Hayleen. –
- Espérame. – Lo seguí, tocamos la puerta y nadie abría. – Deben seguir durmiendo. -
- Tocare de nuevo. – Bill toco y luego de esperar un rato Hayleen abrió, estaba un poco despeinada, al parecer la habíamos despertado.
- Hola… ¿que hacen por aquí tan temprano? – Nos miro con una sonrisa.
- Son las 10am – Contesto Bill.
- Quizás no es tan temprano – Sonrió avergonzada.
- Perdón si te despertamos – Me disculpe.
- No se preocupen, ¿quieren pasar? –
- Claro – Respondió Bill…  entramos y el se sentó muy a gusto en el sofá, yo lo mire y el solo me ignoro.
- ¿Donde esta Luu? ¿Sigue dormida? –
- Pues no, de hecho despertamos temprano, solo que no nos habíamos levantado. –
- Eso quiere decir…- La mire esperando que completara la frase.
- Que no quiere salir de la cama. –
- ¿Puedo saludarla? –
- Claro, le alegrara verte. –
- Entonces te dejo con Bill… - Camine hacia la habitación que era de Luu; podía escucharla tararear, me detuve delante se su puerta y toque suavemente.
- Puedes pasar – Escuche su voz dulce al pensar quizás que era Hayleen quien tocaba. Entre y se encontraba tumbada en la cama cubierta por las cobijas, miraba en dirección contraria a la puerta y su cabeza reposaba sobre sus delicadas manos. Me acerque lentamente sin decir nada para lo cual antes de llegar giro inquieta ante mis sigilosos pasos.
- Andy… -  Termine de acercarme con una sonrisa, me senté en la orilla de la cama para poder hablar con ella.  
- ¿Dormiste bien? – Le dije mientras haciendo caso a lo que Bill menciono, acercaba mi mano hacia su mejilla.
- Si. –
- ¿Por qué no te quieres levantar? – Esta vez acomode los cabellos sueltos detrás de su pequeña oreja.
- No tengo muchas ganas. –
- Es una pena porque quería que conocieran un lugar… supongo que si no vas Hayleen no aceptara venir.-
- Hayleen ama conocer nuevos lugares –
- Y… ¿a ti que es lo que más te gusta? –
- Pues… - Se quedo pensativa y finalmente respondió. - Me gusta tocar el piano –
- Como a Hayleen el violín pero  me refiero a tu pasión –
- creo que… supongo… no tengo una, he vivido preocupada por la atención de mis padres que me olvide de mi.-  Pude notar como apretujaba los diente para evitar que sus lagrimas salieran.
- Todo está bien – continúe acariciando su cabello para tranquilizarla.

- NARRA HAYLEEN –

Hacia rato que Andy había entrado al cuarto de Luu mientras yo comencé a platicar con Bill sin darme cuenta comencé a hablarle de Luu y por alguna razón llego a mi cabeza  el día en que la conocí…

- Sabes Bill… me siento muy feliz de haber conocido a Luu. La verdad es que estamos registradas como hermanas porque sus padres me adoptaron, somos hermanas adoptivas  –
- ¿y porque no se llaman hermanas? –
- Las hermanas pelean y tienden a ser envidiosas… mientras que las amigas… creo que se procuran más.-
- Sus padres… no pasan mucho tiempo con ustedes verdad –
- No… pero…que bueno que vinieron así al menos se distrae. –
- ya que te gusta conocer lugares iremos a uno nuevo… y llevaremos a Luu -
- ¿de verdad? –
- Si claro.-
- ¿A que se deben las sonrisas? –  Andy apareció de la nada.
- Le decía a Rubí que saldremos a pasear –
- ¡oh! Que bien porque Luu se esta cambiando ahora mismo –
- ¿Enserio? – Me sorprendió que la convenciera de levantarse tan rápido ya que cuando se deprime así suele pasar casi todo el día hasta que al fin la convenzo de salir.
- Bueno… tu ve a peinarte – Bill me sonrió amablemente mientras  revoloteaba un poco mi cabello.
- Bueno, bueno pero ya no me despeines más… - Me levante entusiasmada y me dirigí a mi habitación.

- NARRA BILL -

Desde que llegue y me tumbe en el sofá tuve una extraña sensación, no parece maligna pero me inquieta. Andy tiene razón aquí hay algo que se esta escondiendo; cierro los ojos y percibo el olor a hierva húmeda, quizás es alguna criatura perdida que llego aquí por casualidad y usualmente los humanos no ven ni escuchan porque simplemente no quieren hacerlo. El caso de ellas es diferente. Hayleen se levanto y ahora estamos solo Andy y yo en esa habitación.

- ¿Que piensas? – Mire a Andy dándole la razón.
- Dijiste que… ¿era grande? –
- Es lo que creo –
- ¿Porque llegaste a esas conclusiones? – Titubeo un poco y luego respondió.
- Porque… lo escuche tocando el piano –
- ¿Es decir que estaba dentro de esa habitación? –  Me levante sobresaltado.
- Si pero ya debió irse, entre y ya no estaba –
- Iré a revisar… -
Camine hacia aquella puerta cerrada, podía sentir la mirada de Andy siguiéndome. Cerré los ojos para tratar de escuchar mejor; unas pisadas ligeras resonaban en la habitación de Luu, otras en la de Hayleen, finalmente delante de mí y estas eran distintas.
- Se lo que es… - Mire Andy y luego en un solo movimiento gire la perilla para tratar de abrir y la sorpresa que me lleve fue…

Solo espero que hayan escuchado esas hermosas melodias y les hayan gustado

jueves, 11 de octubre de 2012

CAPITULO 4


- NARRA LUU –

¡Maldito Bill no puedo creerlo! ¡Sabia que no estaba imaginándolo realmente estaba ahí! ¿Pero como lo aria admitirlo?.
Caminamos por un rato y ahora nos encontramos en una placida cafetería, Andy y Hayleen se llevan mejor de lo que pensaba mientras yo… yo...  ¡josh! Maldito Bill no quiere admitirlo, luego de  mencionar mi vestido rojo no me contesto nada mas, prácticamente me esta ignorando y estoy comenzando a molestarme. Estar aquí es incomodo,  después de todo esta cafetería esta en un centro comercial  mejor iré a buscar el abrigo mientras ellos tres platican. Me levante  y enseguida todos me miraron.

- ¿Pasa algo Luu? -  Andy me hablo amablemente como siempre.
- No nada, solo… mientras están aquí voy a comprar algo –
- Bueno yo termine mi bebida, te acompañare –
- No, voy y vuelvo pronto – ¡¡Rayos!!, Andy estaba platicando muy a gusto con Hayleen, no quiero arruinarlo.
- ¿Luu no quieres que yo te acompañe?  - Ahora Hayleen quería venir, aunque aprovecharía para contarle sobre Bill pero… creo que eso puede esperar a la noche.
- Iré yo –  Bill termino su bebida haciendo molestos ruidos con la vajilla del vaso y luego se levanto.
- No gracias prefiero ir sola - Le conteste a regaña dientes.
- Estoy tratando de ser amable –
- No quiero ir contigo –  Le dije olvidando por completo que Andy y Hayleen nos miraban.
- Luu dijiste que eras una persona amigable – Ahora Andy me atacaba.
- Lo soy pero… - Mire a Bill con enojo, realmente me hacia quedar mal a mi siempre. – Está bien vamos -  
Avance y antes de voltearme mire a Hayleen quien me sonrío al ver que iría con Bill.  No se, a lo mejor quien le gusta es Andy.

15 minutos pasaron. Paseábamos  por las diferentes tiendas de ropa, trataba de encontrar el abrigo más caro y mas elegante para que la mentira funcionara con Andy. Bill solo me observaba pero no decía nada ¿me observaba? Realmente no miraba nada de la tienda, mantenía su mirada tan penetrante fija en mí, comenzaba a incomodarme pero no quería ser yo quien le hablara. Caminamos otro poco hasta un mostrador con mucha joyería, la chica encargada me mostro algunas y yo las levantaba mostrándome interesada a ver si lograba que Bill volteara a ver lo que sostenía. Pero no funciono. Estuve a punto de gritarle que dejara de verme cuando de pronto…

- Debe estar muy enamorado – La chica del mostrador “a quien le brillaron los ojos” cuando vio a Bill hablo, quizás quería captar su atención.
- No es lo que crees – Le conteste y Bill no dijo nada… pareciera que no la escucho.
- ah bueno… desde que llegaron solo la mira a usted y pensé, pero realmente es muy guapo –
- Bueno creo que es tiempo de irme – La conversación era incomoda, le entregue los collares y avance. 


Bill no miro a la chica ni por un momento, ella casi casi se le declaro. Bueno no. Pero al menos si un chico dice que soy linda le regalaría una sonrisa, sin en cambio el no dijo nada y solo continuo  siguiéndome. Llegamos a otra tienda donde los precios aumentaron considerablemente, vi un abrigo y era el perfecto, se veía bastante costoso así que decidí comprarlo.  En la caja lo envolvieron y me extendieron la bolsa  – ¿pagara en efectivo? – me pregunto la chica al momento en que la sostuve en mi mano  - No – Le conteste mientras con mi mano izquierda sacaba mi cartera, mande las asas de la bolsa hasta mi muñeca para poder usar las dos manos y sacar mi tarjeta de crédito pero Bill me quito la bolsa mostrándose caballeroso, yo solo lo mire con enojo y le extendí mi tarjeta a la chica de la caja, esta se cobro y me extendió un ticket. Ahora si podíamos volver. Di unos cuantos pasos lejos de la caja y gire hacia Bill, le extendí mi mano para que me regresara la bolsa  pero el no hizo nada, trate de quitársela y este se hizo para atrás. Quería gritarle  pero entonces ya le habría hablado yo primero y no quería hablarle, hice un nuevo intento  y otra vez falle, tenia que ser más rápida, esta vez trate de quitarsela avanzando dos pasos, la vi cerca y en un momento estaba arriba. Por mas que saltara no la alcanzaría, solo conseguiría romperla y Bill no mostro expresión alguna lo que me hacia enojar mas.

- ¡Dámela ya! – Le grite al fin y algunos del lugar me miraron sorprendidos, no quería hacerlo, no quería perder pero él realmente me enfadaba. Al fin cambio su expresión y me sonrió.
- Me preguntaba cuanto mas durarías sin dirigirme la palabra -  ¿Acaso era lo que estaba esperando? ¿Que le hablara?  
- Yo me preguntaba cuan molesto puedes ser – Le dije furiosa.
- ¿Porque estas tan enojada? Yo que amablemente me ofrecí para acompañarte –
- ¡Tu…! – No supe que decirle y solo respire profundamente.
- ¿Yo que? –
- Tú comenzaste a ignorarme primero, ¡desde antes de llegar aquí, desde que estábamos en la cafetería! –
- ahh ¿estabas enojada porque no te preste la atención suficiente? –
- No puedo creerlo… -

Lo mire directamente, hirió mi orgullo, me enoje porque no quiso admitir lo del restaurante y el saca esas conclusiones ¡tontas! Le sonreí y en un momento <<paz>> le di una patada en la espinilla  -ahh- exclamo mientras se agachaba. Se que la plataforma de la zapatilla es bastante dura y una patada con todas mis fuerzas debió doler, hasta a mi me dolió. Le arrebate la bolsa ahora que estaba agachado y me fui dejándolo ahí con sus quejidos. Llegue asta donde  Hayleen y Andy,  ellos parecían bastante bien.

- Hayleen, yo creo que te espero en la casa – Llegue toda agitada.
- ¿Que porque? – Ella se levanto.
- ¿Donde esta Bill? – Andy parecía sospechar.
- El esta… - Gire y vi que venia furioso caminando a pasos acelerados hacia donde nos encontrábamos.
- ¡Oye! – Me grito al llegar y me sujeto del brazo bastante molesto.  - ¿Por qué me hiciste eso? –
- ¿ah… Ahora si tienes mas expresiones? – Le dije con sarcasmo.
- ¿Que paso aquí? – Pregunto Andy.
-  ¡Pasa que ella me pateo! -  Contesto Bill molesto llamando la atención de todos en la cafetería.
- Suéltame – Le dije disminuyendo mi voz.
- ¡Me vas a pedir disculpas! –

Baje la mirada y no se, como que mi pie se movió a voluntad propia pateándolo de nuevo en la otra pierna, fue en ese momento que se quejo cuando me zafe y eche a correr. Rayos si que era veloz  y Andy bastante rápido para detener a Bill antes de que me correteara,  al salir, vi que venia un bus y me subí en el sin fijarme que era lo que decía. Al menos escape de ellos ya gastare el tiempo buscando el camino de regreso pero por lo mientras quiero terminar el recorrido.

- NARRA HAYLEEN –

Es increíble que vayan solos y terminan peleándose, es extraño ya que cuando veníamos hacia acá parecían platicar muy a gusto y de pronto eso ceso  ¿que abra pasado? Y lo mas importante ¿a donde se fue Luu?, Salí corriendo detrás de ella pero la perdí, ella realmente es muy veloz. Saque mi celular y comencé a llamarle pero no contestaba.  Ahora no se donde buscarla, no creo que haya vuelto a la casa pero creo que al menos yo debería volver.

- NARRA ANDY –

No encuentro a Luu y todo es culpa de Bill, se que el tuvo la culpa aunque no quiera decirme exactamente que es lo que hizo pero he de decir que Luu tiene una fuerza increíble jaja realmente contuve mi risa cuando la vi patear a Bill tan intrépida. Bueno eso no es importante ahora, sino ¿a donde se metió? Esta ciudad es peligrosa para ellas seria peligroso si se encuentra alguna criatura y no estamos cerca.

- ¿De que rayos te ríes? -  Por un momento olvide que Bill estaba aquí.
- Creí que había dejado de hacerlo – Reí descaradamente en su cara.  
- Esa ingrata me las va a pagar, no le perdonare haberme tratado así –
- Deja de fingir Bill se que tuviste la culpa –
- Yo solo quería jugar un poco y ella se exalto demasiado –
- Tus juegos no son divertidos –
- Para mi si Andy, es solo que tu eres un aburrido -
- Anda con Hayleen yo buscare a Luu –
- Por mí que se pierda –  Por muy enojado que estuviera no podía permitirle decir tantas patrañas.
- No digas estupideces, ¡debes cuidarla! –
- Estoy muy enojado con ella –  Se cruzo de brazos.
- Entonces ve con Hayleen yo encontrare a Luu – Comencé a correr mas rápidamente cuando Bill me detuvo.
-  ¡Espera!... yo… yo cuidare de Luu –
Hizo un gesto extraño, ni siquiera me miro y se me adelanto para buscarla. Quizás comienza a entender.  

- NARRA LUU –

Me encontraba en una especie de explanada donde habían bancas y una fuente, preferí sentarme en la orilla de la fuente y dejar la bolsa del abrigo a un lado,  la verdad no se donde estoy. Para tratar de olvidar lo sucedido llame a mis padres, creo que no fue buena idea. Hace unos momentos, escuche la voz de mi papá mientras la secretaria le informaba sobre mi llamada – Estoy muy ocupado – fue lo único que le escuche decir antes que me dijeran que no estaba, a mi nunca me atendían sin en cambio a Alex al menos le saludan, aunque sea breve, aunque dure poco, pero a mi no.
Mi madre esta enamorada de los conciertos de piano, aprendí y a pesar de ello nunca se ha detenido a escucharme a mí ¿porque soy tan insignificante para ellos?  Eso es lo que pienso. Mis lágrimas comenzaron a caer, rayos no quería que me vieran pero era inevitable, trate de ocultar mi rostro con mi cabello pero aun veía el suelo cuando algo me sorprendió. ¡¡¡Era una sombra!!!! Se veía parada en la fuente donde yo me encontraba sentada, justo a mi lado,  pero media 10 cm aproximadamente ese gorro puntiagudo me dejo temblando de miedo, no quería voltear pero quería salir corriendo, mi cuerpo se paralizo, me levante rápido y torpemente cayendo al suelo. Gire y no había nada, luego mire el suelo y la sobra había desaparecido – ¿Estas bien? - escuche la amable voz de una chica – Yo me encargo – Esta vez… a quien escuche….

- ¿Cuánto tiempo piensas permanecer ahí? –
- Yo… - Mire mi mano y está seguía temblando, aun sentía la humedad en mis mejillas, mi cuerpo fue invadido por un entumecimiento extraño. Miedo.
- Vez, tuviste tu castigo por patearme, aun así te perdono – 

Su brazo se extendió para tomar mi mano que yacía en el suelo, ejerció fuerza para ayudar a levantarme y en cuanto me sostuve de pie solo…  sin pensarlo. Lo hice…  Lo abrace fuertemente para ocultar mi rostro en su pecho, rompí en llanto ahora por dos motivos 1. La llamada que había echo hacia unos segundos y 2. Tenía miedo de que lo que vi no fuera una alucinación. No vi su expresión pero podría apostar que eso lo tomo por sorpresa, quien diría que luego de tratarlo mal terminaría abrazándolo.  

- Esto… no… no le… digas… a Hayleen. P…or favor – Le dije entre sollozos y  fue muy difícil ya que a pesar de todo me sentía apenada, hubiera preferido que fuese Andy pero ¿Por qué tenia que llegar Bill y verme así?      
- Te encontré… - Escuche como me susurraba y por un momento, quizás… pareciera como si llevara muchos años buscándome, no entendí del todo porque me dijo esas palabras…  pero fue extraño. Poco a poco sentí, como sus brazos se recorrían por mi cintura hasta que se cerraron en ella. – Ya no llores – Me dijo. Y luego de ello solo tarde 5 minutos mas en sus brazos para después calmarme y alejarme de él.

- NARRA HAYLEEN - 

Entre a al departamento y no parecía haber nada anormal. Ok, comenzaba a preocuparme ¿a donde pudo haber ido? No conoce el lugar del todo bien. Cerré la puerta de golpe al escuchar un ruido…  - ¿Luu, estas ahí? – Me acerque cuidadosamente.  - ¿Luu? – La llame nuevamente pero no respondía, al parecer el ruido venia de la habitación en donde pedimos colocaran el piano. Comenzó a sonar… ahora si, estaba segura de que Luu estaba allí dentro, acelere el paso para abrir la puerta, tome la perilla y una fuerza me tomo por la cintura para alejarme de ella.

- ¡Suéltame! ¡Ahh!  ¡Luu auxilio! -  Comencé a patalear y gritar con los ojos cerrados, no quería ver a mi agresor.
- Calma… - Una suave voz y luego una dulce risa me hicieron calmar.
- ¿Andy? –  Gire para mirarlo muy sorprendida.
- Al parecer ahora soy un bandido… -
- Lo siento es que me sorprendiste… que crees encontré a Luu – Mire a la puerta cerrada.
- ¿Esta aquí dentro? – Me miro extrañamente, como si supiera que allí no se encontraba.
- Si… si… estaba tocando el piano – Abrí la puerta y solo se hallaba el piano vacío



- Pues… aquí no hay nadie – Se asomo y luego camino hasta la ventana.  – Este lugar es muy pequeño como para que se esconda – Bromeo.
Yo solo me quede ahí pensando… mire el piano… la tapa estaba levantada… pero Luu no estaba… mire a Andy quien me sonreía y luego le pregunte. – ¿Como… como es que entraste?

- NARRA LUU -

Hacia rato que me había alejado de Bill, comenzamos a caminar en silencio, estaba muy apenada, no podía creer lo que vi y no podía creer que le abrace a el, fueron mis impulsos y el momento en el que me encontraba… de cualquier modo debería disculparme.
Lo mire de reojo y solo tenia la mirada delante de nosotros, quise hablar pero mi garganta no producía ningún sonido, finalmente comencé a acercar lentamente mi mano para sujetar su brazo – ¡No! – de seguro si le digo algo lindo comenzara a molestarme de nuevo, le pediré que se vaya.

- Bill… –
- ¿Si? – Se detuvo  y me miro tranquilamente.
- Mejor… me voy sola a casa – Di la vuelta y luego recordé aquella sombra. Gire de nuevo y el yacía inmóvil mirándome.
- ¿Qué pasa? –
- Nada… solo –  No sabia que decir, no quería que supiera que aun estaba asustada.
- No sabes como volver – Me interrumpió.
- ¡Claro que lo se! – Gire otra vez armándome de valor y comencé a caminar sola.
- ¡Le diré a Hayleen! – Me grito y yo me detuve.  
- ¿Qué? -  Camino hacia mí hasta que la distancia fue mínima.
- Le diré también a Andy también  - Levanto una ceja en señal de manipulación.
- ¿Qué les dirás? –
- Que te gusto y lo ocultas tratándome mal –
- ¡De donde sacaste esa conclusión tan tonta! – Debía estar bromeando… solo lo abrace porque me asusto aquella silueta pero si le digo tendrá una razón mas para insultarme o llamarme ¡loca! Además el me correspondió, eso quiere decir que yo le gusto a él… pero si se lo hecho en cara quizás diga algo como “te engañe” o cosas así, no se, quizás solo juega conmigo no me quedaba otra excusa mejor mas que decirle que estaba triste por la llamada a mi padres.
- ¿Y bien? –
- Lo siento… -  agache la mirada y me incline un poco en señal de disculpa.
- ¿Porque te disculpas? – No se lo esperaba porque su mirada estaba más que perpleja.
- Siento haberte pateado, pero es que tú me hiciste enfadar y también siento haberte abrazado, yo solo… estaba triste… por mis padres, y tu llegaste justo cuando… en ese momento… -
- No tienes que inventar excusas… - Me guiño el ojo. – Mientras tu novio no se entere podemos salir si quieres –
- ¡Oye! Estas llevando esto demasiado lejos – ¿Acaso ignoro todo lo que le dije?  ¡El realmente me enfada! –
- Jaja podemos mantenerlo en secreto si me dejas llevarte a tu departamento –
- ¡Iré sola! –
- Entonces le diré a Andy y Hayleen e incluso le diré a tu novio lo nuestro –  Me extendió la mano para que caminara a la par suyo. - ¿quieres que lleve tu bolsa? -
Pase de largo, no tenia opción… no conocía el camino de vuelta, estaba asustada y por si fuera poco me estaba manipulando, es un fastidioso pero creo que al menos… me hizo olvidar… por un momento la razón por la cual había comenzado a llorar.

martes, 18 de septiembre de 2012

CAPITULO 3


- NARRA LUU –

Creo que Alex comienza a tomar nuestra relación seriamente, iremos al restaurante “ Bistrot de Venice”  su nombre suena elegante así que no se que ponerme ¿lo adecuado seria un vestido no? Pero me encantan los jeans ¿se molestara si llevo uno? Me pregunto que usara Hayleen, iré a averiguarlo.

- Toc toc… - Hice el sonido con mi boca.
- Jaja sabes que esta abierto Luu, ya pásate –
- Ok solo quise cerciorarme de que no estuvieras en plenas bragas – Entre.
-  Pues… ¿como ves? – Dio una vuelta modelándome su lindo vestido.
- Te vez genial, yo no se aun que ponerme –
- de que hablas… debes llevar un vestido es un restaurante elegante –  Su mirada era sorprendida
- ¿Es que sabes como es? –
- Vi fotos en internet –
- Amm pero yo no he traído vestidos, ¿importara si llevo jeans? – Hice un gesto de disculpa.
- Por supuesto que importa, ven que yo te presto uno - 

Comenzó a esculcar entre su ropa hasta encontrar un vestido adecuado para mi, tardo un poco ya que casi ninguno de ellos me gustaba, unos eran demasiado elegantes, otros muy cortos, otros descubiertos y podría darme frio ¿no?.  Mentiras, realmente no quería usar esa clase de ropa, no era mi estilo pero debía acostumbrarme.
Mas tarde Alex llego a recogernos, ambas subimos al auto y este comenzó a avanzar rumbo al restaurante, cuando llegamos me sorprendí mucho porque a pesar de ser pequeño  no le impedía ser costoso y elegante. Entramos y en una mesa al centro se encontraban 3 chicos muy elegantes, Alex también iba de etiqueta aunque me pareció gracioso que los cuatro se vieran como pingüinos; camisa blanca saco negro. Debieron escoger otra combinación, Alex nos presento a ellos y rápidamente pude notar como al mencionar que Hayleen se encontraba soltera dos de ellos comenzaron a mirarla más profundamente. Los platillos llegaron y mientras comíamos en pausas conversábamos.

- Y dime Hayleen ¿te interesa algún chico? – Finalmente uno de los chicos comenzó con Hayleen.
- Pero que va, no hay nadie que le interese en este momento, así que si pretendes algo con mi pequeña cuñada trátala respetuosamente – Alardeo Alex.   

El gesto de Hayleen se torno molesto, Alex sabia muy bien que a ella no le interesaría ninguno de sus amigos por mas guapo que fuera y esté seguía sin entender.

- Te equivocas Alex, en este tiempo he conocido a alguien ¿no es así Luu? – Me sonrió confiadamente.
- Amm… si, es así – Me tomo por sorpresa, no sabia que contestar ¿acaso estaba hablando de Bill para zafar?
- ¿El chico de anoche? – Alex miro fijamente a Hayleen. – No durara, cuando menos veas se habrá esfumado, mejor considera relacionarte con uno de estos grandes chicos millonarios  - Señalo orgullosamente a sus amigos.

Alex no entendía nada, el dinero no es todo lo que importa, aunque en un principio yo me acerque a el por esa razón pero ahora lo quiero, es diferente, además en ese entonces quería la atención de mis padres y que mejor que se sintieran orgullosos de un novio millonario para su hija. Tome mi coma de vino, la conversación estaba tomando rumbos incomodos nos iríamos en cuanto termináramos de comer, aparte mi vista un momento de la mesa con mi copa levantada comencé a beber “poco” el vino casi no me gustaba. Mire a otra dirección pero que estaba haciendo ¿aquí?  Cuando entramos no había nadie, creí que Alex se había reservado el lugar entero, baje mi copa torpemente sin dejar de mirarlo a los ojos, eran tan profundos y atrayentes, imposibles de ignorar pero había algo, el no vestía ropas elegante s además en su mano había una copa de vino y antes de llevarla hasta sus labios me hizo  una seña de brindis para luego sonreírme…

- Creo que es muy afortunado -  ¿Que? La voz de uno de sus amigos atrajo mi mirada nuevamente a la mesa.
- ¿Perdón? – Al parecer tampoco puse atención a lo que dijeron antes.
- Digo que Alex es muy afortunado por tener a una novia tan linda como tu – Me guiño el ojo.
- Amm gracias…  - Gire mi mirada hacia Alex. – Alex el restaurante… - Sin terminar mi frase mire hacia donde se encontraba Bill pero este ya no estaba.
- ¿Que querida? – Todos, guiados por mi vista miraron hacia aquella mesa que ahora se encontraba vacía.
- Creo que… me equivoque  - Estupefacta no supe más que decir  - Disculpen, iré a la ventana –

Me levante y todos continuaron como si no hubiese dicho nada, me acerque a la venta haber si lo veía salir mientras en la mesa no había rastro ni de la copa, no se como lo hizo pero salió muy rápido, estoy segura de que estaba allí, detuve mis pensamientos, podía ver como Hayleen se acercaba hacia mi con una mirada preocupada.

- ¿Que sucede? –
- Yo, tengo que decirte algo –  Comenzamos a susurrar.
- ¿Puede esperar? –
- No Hayleen es que ese chico, tu amigo me esta molestando otra vez. –
- ¿De que hablas? –
- Hablo de que nos siguió hasta aquí –
- ¿De verdad? – Su expresión preocupada pasó a ser sorprendida - 
- Estaba sentado ahí hace un momento – Trate de parecer tranquila.
- Eso no puede ser Luu –
- Lo vi –
- Pero Alex reservo el restaurante, igual como lo había hecho ayer, porque crees que no hay más clientes que nosotros –
- Tu… ¿Cómo lo sabes?
-  Luu… ¿no estabas escuchando la conversación verdad? Estaba alardeando acerca de lo que se gasto
- Bueno, digamos que reservo el lugar pero tu amigo pudo haber entrado amm… no lo se, no encuentro una explicación –
- ok te creo ¿como venia vestido? –
- Pues… no venia de etiqueta, jeans negros, botas negras, sus ojos delineados como ayer,  camisa negra, amm traía collares y no lo se venia todo de negro –
- Vamos a hacer algo, iré con ese camarero de haya a preguntarle -  
- Está bien –

Vi como el camarero parecía sorprendido moviendo la cabeza en negación, antes de que Hayleen volviera sabia la respuesta.

- Dicen que nadie ha entrado aquí más que nosotros –
- ¿no me crees cierto? –
- No es eso Luu yo te dije que te  creo pero es raro que no lo hayan visto –
- Sabes mejor vayamos a terminar de comer y al volver tomare una larga siesta –        

- NARRA HAYLEEN –

Lo admito, estar en ese restaurante fue un martirio, y más cuando sus amigos querían obtener mi numero de teléfono pff  - me recosté en la cama-  mire hacia el techo tratando de encontrar figuras en el pero ya me estaba aburriendo ¿a que hora se ira Alex? Desde que volvimos se encero con Luu en la habitación, llevan ahí como dos horas… espero que no quiera pasarse de listo, pero como deseo ir a molestar para que ya se vaya jaja ya se, marcare al celular de Luu para que Alex piense que es su mama.

- Hola Luu –
- Hola, mama que bueno que llamas hace mucho no hablamos –
- ¿Mama?...  ¿Te esta molestando? ¿Voy a interrumpir a tu cuarto? –
- Si mama Alex esta aquí pero si te urge voy y te lo consigo –
- ok Luu mensaje captado voy a interrumpir en 5 min –
- Claro  ahorita le digo a Hayleen que me acompañe  -
- Espérame solo me quito este vestido y me pongo cómoda -  
- No mama, no tienes que marcar de nuevo pero si quieres –
- ok… cuelgo –
- Si mama cuídate mucho, me saludas a papa y no te preocupes ahorita salgo a buscarlo –

Rayos… al parecer acababa de salvarla de algo, por alguna razón quiere que le quite a Alex de encima y lo are. Abrí mi armario y comencé a buscar ropa cómoda, aun era temprano, mire mi reloj y este marcaba las 5:15pm saque un juego  que Luu me había regalado y me lo coloque con unas zapatillas.



Tenía buen gusto aunque no le gustaran mucho los vestidos elegantes, lo que es raro viniendo de una familia en la cual se debe vestir así para cada reunión pero bueno. Camine hacia su cuarto y toque la puerta tratando de no sonar ansiosa

- ¿Si? – Ahí estaba la irritante voz de Alex
- Luu quiero salir a pasear –
- Hayleen que bueno que vienes -  

Rápidamente la puerta se abrió de golpe, Alex estaba recostado en la cama y en cuanto a Luu lucia un poco despeinada

- Hayleen mama llamo y quiere que me acompañes a un lugar –
- ¿Bueno pero y el? – Le dije señalando a Alex
- Yo tengo cosas que hacer, pero cuando vuelvan estaré aquí de regreso – Alex se levanto de la cama y salió de la habitación.
- Le dije que iremos a buscar un abrigo que mama quiere y no quiso ir –
- Aburrido… no me gusta ir a los centros comerciales, las mujeres tardan demasiado  – Alex tomo su saco y se acerco a Luu – Nos vemos en la noche querida -  La beso y luego camino a la puerta.
- Solo deja me cambio ¿si? Tú te ves bonita con eso que te di –
- Gracias… - Me sonroje.
- Adiós Hayleen, cuida a mi novia –
- Adiós Alex -  Torcí la boca sin que se diera cuenta  y luego escuche como la puerta se cerro
- ¿Ya se fue? – Luu se asomo sigilosa.
- ¿Si pero que paso…? -  Entre a su cuarto
- Gracias… debemos tardarnos mucho para que ya no quiera venir  - Camino hacia su armario mientras me lo decía con la voz nerviosa
- ¿Porque? –

Espere un momento mientras Luu veía que ponerse, saco un conjunto que había comprado junto con el que me regalo, también era lindo, se deshizo del vestido y al fin se puso cómoda, realmente lucia linda con su largo y ondulado cabello suelto.



- Hayleen… -  Se sentó en la cama conmigo y tomo mis manos con una mirada llena de angustia.
- Dime que pasa –
- Yo… yo… aun no estoy lista – A pesar de estar solo nosotras dos en el departamento su voz disminuyo considerablemente como si quisiera evitar que alguien escuchara.
- Quieres decir que… -
- Alex… me lo pidió hace un momento y yo...  me levante rapidísimo a contestar tu llamada. ¡Gracias! – Me abrazo.
- Luu pero tú dijiste que lo amabas –
- Si Hayleen pero yo no me siento aun lista para esto –
- Que bien… - Le sonreí. – Estoy feliz de que no elijas a Alex –
- Hayleen te lo digo enserio si lo amo pero no quiero llegar a esa parte aun… y si el vuelve esta noche no se que pueda pasar, tal vez yo termine cediendo y… y… ¡Hayleen no te apartes de mi! –
- No lo hare – Acaricie su cabello. – ¿Entonces iremos a conseguir el abrigo de  mama? –
- Solo compraremos cualquiera pero si quieres seguimos paseando –
- Si, si quiero conocer mas y sinceramente espero que nos encontremos con Andy y Bill –
- Pero… -
- Se que no te llevas bien con Bill pero Andy… Andy me gusta para ti –
- ¡Hayleen que estas diciendo! -  Se sorprendió mucho con lo que dije. – Yo ya tengo a Alex –
- Sinceramente desearía que Andy hubiese llegado antes –
- Pues no fue así, y ya que estas de doctora corazón ¿porque no te relacionas con Bill? –
- Es guapo pero… solo quiero que seamos amigos… hace un rato llegue a esa conclusión jaja –
- bueno, me pondré zapatillas  y salimos –
- Bueno te espero en la puerta –

Fui a mi habitación otra vez a tomar mi bolso, eche mi celular, la cartera, algunos cuantos cosméticos y tome un abrigo, no se que tan tarde volveríamos. Me dirigí a la puerta y al parecer Luu aun no salía de su cuarto,  la abrió y lo primero que me lleve fue un susto.

- ¡Dios! ¿Que haces aquí? –
- ¿Hola justo van de salida? – Andy sonrió aunque no parecía sorprendido.
- Si justo vamos saliendo –
- ¿podemos ir? Pasábamos por aquí y pues  - Bill salió detrás de Andy y lo que me sorprendió fue… que estaba vestido todo de negro justo como había dicho Luu, collares, las botas –
- ¿Bill porque estas vestido así? – Me atreví a preguntarle y en esta ocasión Andy si pareció tomarle por sorpresa mi pregunta.
- De que hablas Hayleen me puse lo primero que tome –
- Bueno pero todo de negro… -
- Casi el closet entero de Bill es negro al igual que el mío…. Lo básico en cuanto a jeans, playeras guantes como los que trae ahorita – Andy se limito a sonreírme.
- También tengo chaquetas de colores, como la roja que traía antier o azules, o blanco ¿porque? – Bill se veía seguro de lo que decía y bueno al tener el closet negro era normal que casi siempre vistiera así.
- No nada solo curiosidad – En ese momento voltee y Luu se dirigía a la puerta, cruce mis dedos para que no le gritara a Bill que lo vio en el restaurante aunque de eso me quedo duda, solo quiero que se lleven bien.
- Hola Luu –
- Hola… ¿que hacen por aquí? – Llego tranquila y mostro una bella sonrisa.
- Pues estábamos de paseo – Andy le extendió la mano y la saludo de un beso en la mejilla.
- Bueno nosotras también vamos de paseo verdad Hayleen –
- Amm si –
- ¿Quieren venir? – La mirada amable de Luu se dirijo a Bill, al parecer me hizo caso al tratar de llevarse bien con él, era lo mejor.
- Claro – Respondió Bill…

Comenzamos a caminar los cuatro, todo parecía ir bien Andy me empezó a hacer la platica y puede notar como Bill y Luu se quedaban un poco atrás, comenzaron a platicar aunque no lograba escuchar lo que decían.

- NARRA LUU –

Ahora Hayleen estaba hablando amistosamente con Andy, un poco alejados de nosotros  y yo tenia que hacer lo mismo con Bill, ¿Cómo comienzo? Para empezar no me puedo sacar a Alex de la cabeza, seguía nerviosa pero el tipo a mi lado sin duda me ponía más nerviosa, era extraño.

- ¿Que piensas? -   
- ¿he? – Bruscamente me saco de mis pensamientos.
- ¿No pelearas conmigo? –
- ¿Realmente te gusta que pelemos? Trato de que nos llevemos bien –
- Me gusta pelear contigo – Sonrió y realmente me gusto, su sonrisa fue… fue hermosa muy resplandeciente  y no entiendo porque pelear cuando puede sonreír así.
- ¿Realmente peleas enserio? –
- Yo no, pero al parecer tu si –  Me echo toda la culpa.
- Eso es porque me haces enfadar – trataba de no levantar mi voz  para que Hayleen no se diera cuenta.
- Yo solo… -

Reaccione, no lo deje terminar su frase cuando lo tome fuertemente de la muñeca, nos detuvimos sin que Andy y Hayleen se dieran cuenta  nos miramos fijamente.

- ¿A que estas jugando? –
- Ah… la verdadera y déspota Luu ha vuelto -  
- Suelo ser una persona amigable y de verdad quiero que nos llevemos bien solo dime como lo hiciste –
-  ¿hacer que? –
- Traes la misma ropa… -  Lo mire cuando trate de creer que lo imagine pero ¿como imaginar cada detalle de su atuendo? Seria imposible.
- si me explicaras de una forma menos agresiva – Tomo delicadamente mi mano y la aparto de su muñeca.
- Yo… no se… quizás si lo imagine –
- ¿me imaginaste? -  Me extendió la mano en señal de avance y continuamos el andar.
- Creo… creo que si –
- Eso quiere decir que te enamoraste de mí en primera vista –
- ¡Claro que no! – Me sorprendió su comentario  -Quizás eres tan molesto que por eso te alucino.  
- jaja alomejor pero… - Se agacho un poco a mi oído.  - Ese vestido rojo… realmente te quedaba muy bien…

OK OK SIGUIENTE CAPITULO DE ESTA HISTORIA FANTASTICA Y LES DEJO EL LINK PARA QUE PASEN A MI PRIMER FIC   :)http://behind-your-dreams.blogspot.mx/